El día 17 de noviembre finalizó la vigesimotercera Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP23), celebrada en Bonn (Alemania). Muchos la han catalogado como la Convención de los pequeños pasos. Así, se han podido alcanzar pequeños progresos destinados a cumplir con los preparativos para la implementación del objetivo final, que es El Acuerdo de París de 2015. Por tanto, la COP23 ha sido más un proceso que un resultado concreto.

En este blog se comentarán los puntos clave que se trataron en la Cumbre del Clima.

¿Cómo prevenir el aumento de la temperatura?

Un hito importante alcanzado en la Cumbre, sin duda, ha sido el de formar la estructura del llamado Diálogo de Talanoa 2018, un proceso orientado a efectuar una supervisión de los compromisos voluntarios por parte de los países de reducir emisiones de gases de efecto invernadero para mejorarlos de modo que se pueda frenar el calentamiento del planeta a un máximo de entre 1,5 y 2 grados centígrados respecto a la era preindustrial.

El debate sobre las metas se centró especialmente en cómo aumentar las acciones antes de 2020, cuando expire el Protocolo de Kioto y se establezca el Acuerdo de París. El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, asumió la responsabilidad de hacer avanzar tal ambición antes de la COP24, en Polonia el próximo año.

Además, la COP23 facilitó el camino para que opere en el marco del Acuerdo de París el Fondo de Adaptación, un instrumento que los países en desarrollo consideran muy valioso porque les ofrece ayuda rápida para adaptarse a los efectos del cambio climático.

¿Y esto quién lo paga?

Otro de los aspectos claves tratados en la Cumbre Climática fue el de la financiación. Sobre este aspecto, existe el consenso en que son los países ricos industrializados quienes han formado su crecimiento en base a la quema de combustibles fósiles. Por tanto, ellos son los responsables no solo de descarbonizar sus propias economías, sino también de ayudar al resto del mundo a hacerlo.

Antes de la COP23, solo se habían asignado 10 mil millones de dólares para el Fondo Verde del Clima, que se usa para la «adaptación y mitigación». Ahora, a partir de 2020, las naciones industriales pretenden gastar 100 mil millones de dólares (85 mil millones de euros) al año para la acción contra el cambio climático en los países más pobres.

¿Qué hacemos con el carbón?

Respecto al carbón, los países participantes estaban pendientes sobre todo de la opinión de Alemania. Cabe recordar que casi la mitad del mix energético alemán viene representado por este combustible fósil.

Angela Merkel, reconoció la necesidad de una salida del carbón, a pesar de que Alemania se encuentra en una situación delicada debido a que aún no hay Gobierno; las conversaciones sobre una coalición después de las elecciones federales se están alargando más de la cuenta.

Sin embargo, hubo un compromiso destacado en relación con el carbón. Este fue la promesa de 20 naciones, lideradas por Reino Unido y Canadá y entre cuyos miembros se encuentran países como Francia, México o Italia, y que forman parte del llamado “Powering Past Coal Alliance”, de eliminar gradualmente el carbón, el combustible fósil más sucio. Aunque la mayoría de estos países tienen un bajo consumo de carbón, esta es la señal correcta: el carbón es el combustible del pasado, las energías renovables son el futuro. Los países miembros de la alianza, lanzada durante la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático en Bonn (COP23), acordaron eliminar gradualmente las centrales térmicas tradicionales y establecer una moratoria sobre cualquier nueva central eléctrica a carbón tradicional sin captura y almacenamiento de CO2. Una serie de empresas y otros actores no gubernamentales también se han comprometido a centrarse en impulsar sus operaciones libres de carbón. Los países fundadores de la alianza quieren alcanzar 50 socios antes de la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático de 2018, la COP24, en Katowice, Polonia.

¿Y Estados Unidos?

El país norteamericano, se presentó con una delegación de bajo nivel tras el anuncio del presidente Donald Trump de abandonar el Acuerdo de París. Sin embargo, no bloqueó las negociaciones. Su participación se calificó como profesional y constructiva.

Aunque la delegación oficial de Estados Unidos fue mínima y se aferró al tema del carbón, la delegación extraoficial del país norteamericano dejó de manifiesto un rotundo «todavía estamos».

Papel de España en la COP 23

Durante esta Cumbre, la Unión Europea, con el Comisario Europeo de Energía y Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, a la cabeza, ha jugado un papel clave para alcanzar los resultados obtenidos. España ha participado activamente en las negociaciones, y también ha presidido un nuevo encuentro de la Red Iberoamericana de Oficinas de Cambio Climático y ha participado en el tramo de alto nivel de la «Iniciativa 4 por mil: Suelos para la seguridad alimentaria y el clima”. Dicha iniciativa, tiene como objetivo asegurar que la agricultura juega su papel en el combate contra el cambio climático.

Además, la delegación española ha estado encabezada por la Ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) y la Secretaria de Estado de Medio Ambiente, que han celebrado diversas reuniones, entre ellas, con el presidente del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), con la Presidencia de la COP 23 o con la secretaría ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático.

Próximos pasos y conclusiones

Una vez finalizada la COP23, empieza la cuenta atrás para cumplir con los plazos antes de la COP24. En la siguiente tabla se puede ver los principales eventos que hay en la agenda de cara a los siguientes días:

En Bonn, el apoyo a la acción climática de los países, las regiones, las ciudades, la sociedad civil y el sector privado ha sido claramente visible.

Esta Cumbre, ha preparado el camino para una acción más ambiciosa de cara al próximo Diálogo de Talanoa de 2018, tras haber acordado entre todas las naciones lanzar un proceso para aumentar los niveles de ambición de la acción climática antes de 2020.

En líneas generales, se han cumplido los objetivos trazados previamente antes de la Cumbre que, en resumidas cuentas, era efectuar los preparativos para la implementación del Acuerdo de París. Sin embargo, queda mucho por hacer de cara a la COP24.

Según algunas voces estos objetivos no alcanzan. La Organización Mundial de Meteorología asegura que, si siguen a este ritmo las emisiones de gases contaminantes, la temperatura subirá en 2100 en tres grados centígrados.

Enrique Battistini | Energy Consultant

 

Si te ha parecido interesante ¡compártelo!

Artículos Recientes


¿Quieres saber más?